Celestica, la rama valenciana de MSL SPV Spain, una empresa estadounidense que compró la empresa canadiense de componentes electrónicos Celestica, registró un aumento del 19% en sus ventas en 2021, llegando a los 63,3 millones de euros. Las cuentas depositadas en el Registro Mercantil indican que la actividad de la compañía vinculada a la demanda en clientes del segmento de electro-medicina e industrial se ha recuperado progresivamente. A pesar de ello, la compañía todavía mantuvo pérdidas, aunque redujo la cifra de 3,4 a 2,1 millones de euros.
En el informe de gestión que acompaña a las cuentas, se destaca que la cifra de negocio de Celestica Valencia en el segmento de electro-medicina ha aumentado un 62% con un “crecimiento sólido y sostenido” y la introducción de nuevos clientes. En el segmento industrial, el aumento de la cifra de negocio fue del 24%. Por otro lado, en el segmento de aviónica y defensa creció un 3,2%, manteniendo su situación de relativa depresión coyuntural en la facturación debido a la disminución de vuelos y actividad que afecta a toda la industria aeronáutica.
La compañía destaca que el núcleo de sus ventas se centra en cinco clientes de aviónica y defensa, industrial y electro-medicina que suponen un 62,3% de la facturación, mostrando una mayor diversificación que en el ejercicio 2020. Además del negocio de fabricación de placas electrónicas (EMS) y ensamblaje de subconjuntos, Celestica Valencia continúa la diversificación alcanzada en los segmentos de mercado a los que sirve la fábrica, incluyendo el ensamblaje de robots destinados a cirugía en el segmento de electro-medicina y el diseño y desarrollo de soluciones avanzadas para equipamiento médico.
Las perspectivas para el año 2022 de la compañía están afectadas, aunque en menor medida, por la covid-19, especialmente en los clientes de aviónica y defensa y por las dificultades de acopio en los mercados de componentes, los sobrecostes en fletes y transportes, sobrecostes de la energía y volatilidad en los mercados debido a la situación geopolítica mundial. La compañía destaca que “continúan las acciones tendentes a aumentar la diversificación de la fábrica además del desarrollo de las cuentas actuales y de nuevos clientes”.
En resumen, la compañía ha obtenido resultados negativos en el ejercicio 2021 debido a la limitada actividad del centro, en parte por el efecto covid-19 y los gastos asociados a la reestructuración de las operaciones. Sin embargo, la demanda para el 2022 se prevé superior a la del 2021 con un importante crecimiento, tanto por actividad vinculada a nuevas cuentas como por la progresiva recuperación en la demanda en los segmentos de aeroespacial y defensa e industrial.