Bosch Sensortec ha revolucionado el sector de la vigilancia de la calidad del aire con la introducción del BMV080, el sensor de calidad del aire PM2,5 más pequeño del mundo. La mayoría de las estaciones de medición de la calidad del aire sólo proporcionan datos exteriores promediados en el tiempo, pero el BMV080 proporciona información localizada y en tiempo real sobre las partículas PM2,5, que son las más relevantes para la salud humana.
Según el Dr. Lucas Ginzinger, jefe del área de productos ópticos de Bosch Sensortec, la calidad del aire interior puede ser un problema importante, ya que las concentraciones de PM2,5 procedentes de la cocina doméstica alcanzan niveles 100 veces superiores a los límites aceptables en viviendas mal ventiladas. Con el BMV080, ahora es posible identificar la mala calidad del aire en tiempo real y reaccionar ante ella.

El elemento sensor BMV080 es ultracompacto, mide solo 4,2 mm x 3,5 mm x 3 mm y tiene un diseño sin ventilador, no intrusivo y silencioso. El sensor tampoco requiere mantenimiento y es menos propenso a fallos de funcionamiento, lo que lo convierte en una opción ideal para dispositivos wearables o IoT como monitores de calidad del aire, termostatos inteligentes, altavoces inteligentes y purificadores de aire.
El sensor utiliza láseres ultracompactos y fotodiodos integrados para medir las concentraciones de PM2,5 directamente en el espacio libre sin necesidad de ventilador. Gracias a sus sofisticados algoritmos, el BMV080 puede integrarse fácilmente en los sistemas de casas y edificios inteligentes para proporcionar notificaciones sobre la calidad del aire a los residentes. Cuando los niveles de PM2,5 superan un umbral, los residentes o el sistema domótico pueden tomar medidas para ventilar el aire encendiendo un extractor o un filtro.
En conclusión, el BMV080 cambia las reglas del juego en el control de la calidad del aire, ya que proporciona información localizada y en tiempo real sobre las partículas PM2,5 para ayudar a mantener el aire interior limpio y saludable.